lunes, 13 de octubre de 2008

Amor después de la muerte

La tarde templada vela
de la anciana adormecida
el leve sueño. Anida
una sonrisa que encela
lo que un soplo ya desvela:
repara y niega el receso
tan antiguo. Y el suceso
la felicidad devuelve.
El muerto amado la envuelve
con un suspiro y un beso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hace mucho que no escribes. Te echamos de menos.